La carrera por el desarrollo del hidrógeno verde, una competición sostenible
La carrera por liderar la producción de hidrógeno verde ha comenzado y no son pocas las potencias mundiales que aspiran a mantenerse en cabeza
Conocido como el hidrógeno renovable, la producción de hidrógeno verde permite obtener un combustible limpio a partir de energías renovables. Es considerado ya como el gran candidato para sustituir los combustibles fósiles en sectores difíciles de descarbonizar, y tanto los Gobiernos, como el sector económico, han reconocido que el hidrógeno es un pilar imprescindible para una transición energética totalmente sostenible.
¿Qué voy a leer en este artículo?
Cómo se produce el hidrógeno verde
Según los datos de la Agencia Internacional de la Energía (IEA, por sus siglas en inglés), la demanda global de hidrógeno en 2020 fue de 90 millones de toneladas. Sin embargo, la mayor parte se produce a partir de los combustibles fósiles. Según estima la IEA, alrededor del 99 % del hidrógeno mundial se produce a partir del gas natural, el carbón y el petróleo. Estos procesos generan emisiones de CO₂, por lo que no generan hidrógeno limpio o sostenible.
“La demanda global de hidrógeno en 2020 fue de 90 millones de toneladas”
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Se trata de procesos como la transformación molecular, que consiste en diferentes técnicas en las que se practican una serie de reacciones químicas para obtener hidrógeno. La más utilizada se realiza a partir del reformado de gas natural de los yacimientos petrolíferos, por lo que es un proceso que produce emisiones de carbono. De todos los métodos, este es el más utilizado en la actualidad.
También podemos obtener hidrógeno con la gasificación con vapor de agua y oxígeno puro, que se lleva a cabo a partir de carbón o de biomasa. A partir de un reactor se quema el carbón o la biomasa a altas temperaturas. Durante la combustión se liberan gases que dan lugar, por un lado, a dihidrógeno y, por otro, a monóxido de carbono. Así que tampoco se trata de un método libre de emisiones.
La opción más sostenible y la más extendida para producir el hidrógeno verde es la electrólisis del agua impulsada por energía eléctrica renovable. Consiste en la descomposición del agua (H₂O) en los gases oxígeno (O₂) e hidrógeno (H₂) por medio de una corriente eléctrica continua que se conecta mediante electrodos al agua.
Países que lideran la producción de hidrógeno verde
La carrera por liderar la producción de hidrógeno verde ha comenzado y no son pocas las potencias mundiales que aspiran a mantenerse en cabeza. Un informe de principios de año de la Agencia Internacional de Energías Renovables (IRENA), analiza los cambios políticos y económicos que se están produciendo en el panorama energético poniendo el foco en este nuevo combustible limpio.
¿Quiénes lideran el desarrollo de iniciativas políticas, tecnología e instalaciones para promover el hidrógeno limpio?
China
China es el mayor consumidor y productor de hidrógeno del mundo, pero la mayor parte de la producción del país es hidrógeno "gris". Es decir, que se genera a través de combustibles fósiles. Sin embargo, la tendencia desde 2019 es otra. Y es que el gigante asiático ya está desarrollando más de 30 proyectos de hidrógeno verde, el producido a partir de energías renovables.
El plan económico quinquenal de China reconoce el hidrógeno como una de las seis industrias del futuro. Y aunque todavía no existe una estrategia nacional, el hidrógeno figura en 16 estrategias energéticas provinciales y municipales.
La Unión Europea
La Unión Europea (UE) tiene claro que el hidrógeno es una de las tecnologías clave para alcanzar los objetivos del Acuerdo Verde Europeo. Los planes de la UE incluyen instalar 40 gigavatios de capacidad de electrolizadores de hidrógeno renovable para 2030. Un objetivo que, de conseguirse, colocaría a la UE como uno de los líderes indiscutibles en la producción de hidrógeno verde.
“Los planes de la UE incluyen instalar 40 gigavatios de capacidad de electrolizadores de hidrógeno renovable para 2030”
Para conseguirlo, se configuró La Alianza Europea para el Hidrógeno Limpio, que tiene como meta incentivar la inversión y el despliegue a gran escala de proyectos de hidrógeno verde con el fin de descarbonizar la economía europea.
Y España aspira a liderar esta carrera dentro de Europa. Tiene la capacidad de crear un proyecto nacional alrededor del hidrógeno renovable, que impulse la industria del país, el conocimiento tecnológico y la creación de empleo. La Hoja de Ruta del ejecutivo español incluye objetivos nacionales de implantación del hidrógeno renovable a 2030, incluyendo 4 gigavatios de potencia instalada de electrolizadores, y prevé una reducción de emisiones de gases de efecto invernadero en 4,6 millones de toneladas equivalentes de CO2.
India
El hidrógeno verde podría ayudar a la India a conseguir la independencia energética en 2047, según declaró el Primer Ministro, Narendra Modi, durante la presentación de la Misión Nacional del Hidrógeno del país en 2021. La primera fase de este plan se centra en incentivar el suministro de energía limpia para atender la demanda prevista de este combustible limpio.
El hidrógeno verde podría ser una gran oportunidad de valor añadido para la India, que aumenta su apuesta por las energías renovables en detrimento de los combustibles fósiles importados, que actualmente cubren la mayor parte de la demanda de petróleo y gas del país.
Japón
En 2017, Japón hizo historia al ser el primer país en formular una estrategia nacional de hidrógeno como parte de su ambición de emplear este combustible en todos los sectores, según el informe de IRENA. Solo en 2020, la inversión en tecnología relacionada con el hidrógeno y en pilas de combustible fue de 670 millones dólares.
La organización destaca que, aunque este país carece de los recursos naturales necesarios para conseguir niveles suficientes de energía eólica o solar para producir hidrógeno limpio por sí mismo, está desarrollando acuerdos de suministro a largo plazo para importar hidrógeno del extranjero.
Corea del Sur
Para Corea del Sur, el hidrógeno es el motor clave para su desarrollo económico y la creación de empleo. Así lo contempla en su hoja de ruta, que detalla la ambiciosa meta de instalar 200.000 FCEV en 2025, unas 20 veces más que en 2020.
Además, en 2021, Corea del Sur aprobó la Ley de Promoción Económica y Control de la Seguridad del Hidrógeno, la primera ley del mundo destinada a promover los vehículos de hidrógeno, las estaciones de carga y las pilas de combustible.
Los planes de desarrollo y producción del hidrógeno verde están proliferando en todo el mundo. Una realidad que nos acerca a un futuro donde este combustible ocupe por fin el papel que necesitamos en la descarbonización del planeta.
Fuentes:
