Estrategias ante el cambio climático: contracción
El objetivo es mantener las emisiones de GEI global y sistemáticamente estabilizadas.
Una tercera línea estratégica trata de ir más allá de la mitigación. Su objetivo es mantener las emisiones de GEI global y sistemáticamente estabilizadas en unos niveles que no fuercen el incremento de la temperatura media de la Tierra por causas antropogénicas más allá de los 2,5º. Es el enfoque contracción y convergencia (C&C).
Se propone establecer un valor de emisiones por persona hacia el cual debe converger toda la humanidad, fijando un año de convergencia y organizando el proceso de contracción global de las emisiones, al cual cada país se adheriría en función de su punto de partida. Esta propuesta maneja un principio ético: todos los habitantes de la Tierra tienen derecho a un desarrollo y a un bienestar similar que habrían de expresarse en una cifra similar de emisiones per cápita. ¿Es posible una contracción de las emisiones globales de GEI? Una respuesta favorable parece necesaria en el horizonte del año 2050: para entonces, la población de la Tierra será de más de 9.000 millones de habitantes y el nivel de vida en los países de economías emergentes habrá aumentado en la senda de los industrializados, pues están creciendo a un ritmo de hasta el 10% anual.
Un buen indicador de la tendencia a la contracción de emisiones sería el cumplimiento de los 8 Objetivos del Milenio de Naciones Unidas – entre ellos, reducir la pobreza o garantizar el agua potable al conjunto de la humanidad -, porque manifestaría un cambio de mentalidad respecto a la sostenibilidad y a la suficiencia en las sociedades más enriquecidas.
