Cambio climático e incendios forestales: ¿qué está pasando en el mundo?
Los incendios forestales no solo llegan antes, sino que son más intensos. ¿Por qué el cambio climático está aumentando su frecuencia?Medios de todo el mundo vuelven a sacar a la palestra a los incendios forestales, un fenómeno que se produce de forma natural o intencionada, pero que, desde unos años, ha despertado las preocupaciones de la comunidad científica por el aumento de su frecuencia e intensidad. Ya no es un tema recurrente de verano, sino que ahora son protagonistas prácticamente todo el año. Si 2023 marcó récords por los incendios históricos en Grecia y Canadá, el año en curso no se queda atrás, afectando a países como Estados Unidos, Brasil, Chile o Portugal, con especial foco en la Amazonía. En este artículo te contamos por qué el cambio climático está acelerando la generación de incendios forestales y qué medidas se pueden llevar a cabo para evitarlo.
¿Qué voy a leer en este artículo?
El cambio climático anticipa los incendios forestales
El aumento de las temperaturas globales es uno de los principales motores detrás del incremento en la frecuencia y severidad de los incendios forestales. Según Yale Climate Connections, el cambio climático está provocando condiciones más secas y calurosas que facilitan la ignición y propagación de los fuegos. A medida que las temperaturas suben, la humedad del suelo disminuye, creando un entorno ideal para los incendios.
En este mapa elaborado por la NASA, conocido como FIRMS (Fire Information For Resource Management System), podemos observar datos en tiempo real sobre los incendios activos en todo el mundo. Este sistema permite a los bomberos, científicos y otros usuarios monitorearlos y detectar tendencias. Es impactante descubrir, a vista de pájaro, la cantidad de fuegos activos simultáneos que hay en el mundo.
Pocos lugares parecen inmunes: Australia, Indonesia, Canadá, Estados Unidos o el norte de África han copado las portadas de todo el mundo debido a los incendios forestales que han sufrido en los últimos años. Sin embargo, la región que más está experimentando este incremento es Sudamérica con casi medio millón de incendios forestales registrados en lo que llevamos de 2024. Zonas como el Gran Chaco, la cuenca de Maracaibo y el norte del Amazonas son las más afectadas; de hecho, esta última ha visto triplicada la cantidad de días al año con condiciones climáticas extremas propicias para incendios (altas temperaturas, sequías y baja humedad), según este estudio publicado en ‘Communications Earth and Environment’.
La mano del hombre suele estar detrás del inicio de la mayoría de los fuegos. En Argentina, el Servicio Nacional de Manejo del Fuego (SNMF) muestra en sus informes que, desde agosto de 2021, el 95 % de los incendios se debieron a la intervención humana.
Sin embargo, expertos señalan que el cambio climático duplica con creces la probabilidad de que se produzcan incendios y también ayuda a su rápida propagación. De hecho, un informe de la Universidad de California en Berkeley concluyó que la temporada de incendios en el oeste de los Estados Unidos es ahora 75 días más larga que en la década de 1970.
Según el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC), el cambio climático aumenta la probabilidad de sequías, tormentas y otras anomalías climáticas como es el caso de los megaincendios. Esos eventos, que ocurrían una vez cada 100 años, de repente suceden una vez cada 10 años. Las previsiones del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) son que el número de grandes incendios puede aumentar hasta un 50 % para 2100. El cambio climático no solo genera el ambiente propicio para que se adelanten los grandes fuegos, sino que también incrementa el tamaño y la frecuencia de estos.
¿Cómo impactan los incendios forestales en la naturaleza?
Estos incendios representan una grave amenaza para el medio ambiente, la biodiversidad y las comunidades cercanas. Pueden destruir extensas áreas de vegetación, afectando los servicios ecosistémicos y provocando la degradación de hábitats naturales para muchas especies. De hecho, se espera que los cambios en los regímenes de incendios conduzcan a una pérdida masiva de biodiversidad, poniendo en peligro a más de 4.400 especies terrestres y de agua dulce.
El aumento de la erosionabilidad del terreno, fruto de la pérdida de la cubierta vegetal, puede afectar en la calidad y la cantidad de agua, al causar cambios en el terreno que impida que el agua se filtre correctamente.
Además, la emisión de grandes cantidades de humo y cenizas contribuye a la contaminación del aire, afectando la calidad de este y representando riesgos para la salud humana. Los incendios forestales de Canadá de 2023 emitieron al menos 410 millones de toneladas de CO₂, superando las emisiones anuales de un país como España (244,3 en 2022).
Prevenir, gestionar y controlar: medidas contra los incendios forestales
Implicación de las comunidades
En Portugal, el 75% de la superficie forestal está en manos de pequeñas propiedades privadas, con parcelas que tienen un tamaño medio de aproximadamente una hectárea. Esta fragmentación, combinada con la inactividad de los propietarios, limita la capacidad de gestión forestal para prevenir los incendios.
Para solucionarlo, ha puesto en marcha un plan de gestión forestal junto con estos pequeños propietarios para fomentar la gestión sostenible de los bosques y la protección contra incendios extremos.
Francia, por su parte, obliga por ley a los propietarios a desbrozar el bosque y el sotobosque que rodea sus propiedades. El gobierno creó mapas digitales para indicar a los propietarios si sus terrenos están afectados y dónde están los límites de su responsabilidad con las medidas de prevención. En España, existen brigadas forestales encargadas de limpiar montes, podar árboles y crear cortafuegos, acciones clave para prevenir incendios forestales extremos y proteger la biodiversidad de sus ecosistemas.
El pastoreo extensivo como aliado
La reducción de la biomasa es crucial para prevenir los incendios forestales, ya que elimina la continuidad del combustible y establece una estructura y características de la vegetación que mejoran la capacidad de gestión de los incendios. Por ello, muchos países europeos, entre ellos España, han recurrido al pastoreo como una opción para hacer que los paisajes sean más resistentes al fuego. Sin embargo, para que el pastoreo extensivo sea efectivo a nivel de paisaje, es necesario contar con un número importante de pastores y dirigir esta actividad hacia las zonas más estratégicas.
Al sur del país, en Andalucía, se ha puesto en marcha un programa que consiste en un pastoreo dirigido para reducir la biomasa en zonas muy concretas y mantener una estructura forestal adecuada para la prevención de incendios. Para incentivar a los pastores a que lleven allí su ganado, se ofrece compensaciones económicas como pago por sus servicios ambientales.
IA para prevenir los incendios forestales
En Turquía, unos 230.000 km² de sus 783.562 km² de superficie están cubiertos por bosques, en su mayoría de propiedad pública. Por desgracia, una parte importante de ellos ardió en la región mediterránea en 2021 en la peor temporada de incendios forestales de la historia del país.
Una característica de los incendios forestales es su imprevisibilidad. La actividad humana, el terreno y las condiciones meteorológicas influyen en la probabilidad de que se declare un incendio forestal. Para intentar predecir los focos y distribuir los recursos de forma más efectiva, el Centro para la Cuarta Revolución Industrial del Foro Económico Mundial, Koç Digital, TMAF y Deloitte lanzaron la iniciativa FireAId.
FireAId es un mapa interactivo de riesgo de incendios desarrollado mediante algoritmos IA. Proporciona información crucial para que las autoridades se preparen y respondan a los incendios, con herramientas de simulación que procesan el tamaño del fuego, predicen su avance y evalúan las tácticas de extinción. Y, según indican, los resultados están siendo positivos. La prueba piloto de Turquía devolvió una tasa de precisión de del 80 % en la predicción de la ignición de incendios forestales.
En resumen, la prevención, la respuesta rápida y la gestión adecuada serán clave para combatir los incendios forestales. Además de controlar la deforestación ilegal y promover prácticas de agricultura y ganadería sostenibles, algunos expertos destacan las antiguas prácticas indígenas de quema controlada y de baja intensidad como una estrategia eficaz para eliminar la vegetación seca y otros materiales inflamables del suelo, ayudando así a prevenir incendios forestales.
Fuentes:
- https://efi.int/sites/default/files/files/publication-bank/2024/PPRIF_02_2024_ES.pdf
- https://ethic.es/2023/05/empiezan-antes-los-incendios-forestales/
- https://www.sostenibilidad.com/medio-ambiente/perdida-biodiversidad/
- https://elpais.com/america-futura/2024-10-11/sudamerica-cada-vez-mas-seca-mas-caliente-y-mas-inflamable.html
- https://www.nature.com/articles/s41559-024-02452-2